Mi cuerpo puede ser explorado,
ultrajado,
torturado,
investigado,
rajado,
pinchado,
cosido,
desnudado,
tocado.
Sin embargo no puede ser
mostrado
en las redes sociales.
Hoy he intentado publicar
un recuerdo en Facebook
de una de las maravillosas fotos
que me hizo en su día
la artista sin par, Stefania Scamardi.
La propia plataforma, años después
me la bloquea por infringir normas.
Entiendo que se han endurecido
las restricciones de los desnudos.
En eso se entretienen mientras el mundo
se vuelve cada vez más inhumano y violento.
Quitan tetas
para promocionar guerras.
Esconden los culos
favoreciendo los intereses
de quienes siempre ganan.
Desde mi rincón de sal y paz
no entiendo nada.
O lo entiendo tan bien
que no quiero ni saber.
Es sacar la naricilla
fuera de mi burbuja
y oler de lejos la putrefacción
de una sociedad
cada vez más enferma.
Prohibir lo natural
solo nos puede provocar
enfermedad y desazón.
Desconectarte de tu cuerpo,
verlo como algo tabú
solo puede generar frustración.
Me encantaría que las cosas
fueran diferentes.
Sin embargo sé
que son como son.
Así que mi único consuelo
consiste en contaros
que siento
que vamos
de mal en peor.
Solo el amor
y volver a ser quienes somos
nos puede salvar el culo,
las tetas
y el alma.
Comentarios
Publicar un comentario
Muchas gracias 😊
Por estar, por leerme y encima dedicar un ratito de tu vida más para compartir tu opinión y tu sentir.
Todo mi amor 💕