¡Ay qué sería de mi sin mis cachitos!
Menos mal que me queda
esta ventanita al mundo
para poderme asomar de vez en cuando.
Y saludar a quienes estáis al otro lado.
Y sacar lo que me angustia o me alegra.
Mis reflexiones,
las vuestras.
Escribir es mi medicina más recurrente.
Empecé de niña, con 12 años,
mi primer diario.
Fue mi tesoro más preciado.
Aquellas libretas que aún conservo con cariño,
me recuerdan que sigo siendo
muy parecida a quien fui.
Hace pocos años comencé
a compartirme con timidez por facebook.
Gracias a vuestros comentarios,
hace dos años inauguré mi blog,
mis cachitos benditos.
Dos años y más de 18.000 visitas.
No sé para los mundos modernos,
pero para mí son un mogollón.
Jamás pensé que mis palabras,
mi alma,
pudiera interesar a más gente
que la cercana.
Así que hoy,
quiero daros de nuevo las gracias.
Saberos al otro lado,
me anima muchos días
a ponerme delante del teclado.
Incluso me estoy planteando
recopilar los cachitos en un libro.
Me da hasta vértigo pensarlo.
También alegría e ilusión.
Gracias por estar.
Gracias por seguirme.
Gracias de corazón.
Me encanta cómo escribes, tienen tanto sentimientos tus palabras y tanta verdad en ellas. Te animo a escribir ese libro que con mucho gusto lo leería.
ResponderEliminarMuchísimas gracias por tus palabras y tu cariño! Un abrazo inmenso.
Eliminar