Trozos, trazos

Como no sé qué escribir, voy a dejar aquí y allí
trozos, trazos, muletas y retazos,
en cada letra, a cada paso.
Saborear vivir lento. Compartir la alegría de vivir.
Sonrisas eternas. Rostros rotos de dolor.
Seguir, sonreír, sostener,
mantener la dignidad, la estabilidad, la fragilidad.
Vida eterna que te vas. No te vas, te quedas.
Llegas al límite, sin embargo justo al borde del abismo retrocedes, y te quedas.
Y rimas amor con margaritas, lentejuelas y gazpacho.
Como sea, como puedas. Porque al fin siempre puedes.
"La vida jamás te pone en una situación que no seas capaz de superar" (me dijo alguien una vez).
Y cada día cuando todo empieza, aunque en realidad continúa, agradeces.
Doy gracias por haber vivido más despacio, más cerca de lo esencial, más lejos del vacío del alma.
Agradezco a la palabra que utilizo para sanar, compartir, comunicar.
Rimo sabor con mojón.
Amor con melón.

15 abril 2016

Comentarios