Reencuentro

Entre decisión y decisión

me he tomado un respiro.

Un respiro para un reencuentro

muy deseado.

Hace más de 25 años viví

una aventura inolvidable.

Con apenas 23 me fui sola

de Erasmus

a Rotterdam.

No conocía el país,

ni la ciudad,

ni el idioma

ni a nadie.

Solo sabía que quería volar

y que había llegado mi momento.

Así que accedí a continuar mi carrera

a cambio de poder hacerlo fuera.

Allí viví experiencias imborrables.

Fue un año de años

que llevo tatuado

en las entrañas.

Sin duda un gran regalo

que me hicieron mis padres.

Hubo de todo mucho.

Fue más que un gran hermano.

Y claro, en esas circunstancias,

haces familia.

Este fin de semana

nos hemos vuelto a reencontrar.

A alguna hacía más de 13 años

que no la veía.

Pero da igual.

El vínculo fue tan profundo y auténtico

que al volvernos a ver

las risas y el amor

afloraron a borbotones.

¡Qué gusto!

¡Qué maravilla!

Sentirme otra vez parte

de un grupo tan diverso.

Lametones para el alma.

Gustazo de primavera.

Me costó la vida llegar,

pero llegué.

Y tanto que me alegro.

Mis niñas bonitas me han dado la vida.

Mi amor lo ha hecho posible,

pues las fuerzas me faltaban

para conseguirlo por mí misma.

Gracias por haber insistido

hasta conseguirlo, Bea.

Gracias por tanta hospitalidad,

Lizbeth.

Y a ti Iciar,

gracias por tu genialidad infinita.

Gracias a las tres

por quererme tanto.

Ha sido un lujo.

Gracias.

Comentarios

Publicar un comentario

Muchas gracias 😊
Por estar, por leerme y encima dedicar un ratito de tu vida más para compartir tu opinión y tu sentir.
Todo mi amor 💕