Más fácil de lo que parece

Con lo fácil que es quererse

lo complicado que lo hacemos

muchas veces.

¿Porqué no sabemos amar?

Amar en el más amplio sentido de la palabra.

Amarnos a nosotros mismos

y a todo lo que nos rodea.

Otros humanos,

otros animales,

otras flores.

La tierra que pisamos,

el agua que bebemos,

el aire que respiramos.

El árbol cuya sombra nos cobija.

La nube que nos embelesa.

Estamos empeñados en destruir

lo que realmente interesa.

Y así andamos los humanos.

Como pollo sin cabeza.

Desubicados,

dolidos,

perdidos.

Mucha depresión.

Más ansiedad.

Trastornos mentales a tutiplén.

¿Cuánto rato de tu día pasas

mirando al cielo,

sin más?

No hay tiempo para eso.

No hay tiempo para nada más

que trabajar

y mirar una pantalla

que te absorbe la voluntad.

Ahondamos en las diferencias.

Ignoramos lo que nos une.

Nos colocamos en extremos

que nos empequeñecen,

nos hieren.

Nada es como nos cuentan.

La luna y el sol tienen la clave.

La solución está

en lo que tenemos alrededor.

En lo vivo,

len lo que sientes.

Todo el día pensando.

Todo el día haciendo.

Sin parar.

Sin relajar.

Sin saber lo que de verdad

queremos.

¡Basta ya!

Vamos a detenernos.

A mirarnos.

A sentirnos.

A querernos.

Que amando todo fluye.

Que amar

es más fácil

de lo que parece.


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