no
hubiera sentido dolor y cansancio crónicos.
No
tengo ni idea de si hubiera llegado al punto en el que estoy.
Así
que solo puedo hablar de una vida en la que el dolor y la extenuación
conviven
con todo lo demás.
Me
pasó mi querida Nené un artículo cuyo título es “del dolor no
se aprende nada”.
En
mi experiencia, el resultado es el opuesto.
Por
supuesto que para llegar donde he llegado
he
tenido que transitar caminos locos, durísimos y de mucha
resistencia.
Es
cierto que no ha sido fácil, y que ni siquiera a veces lo es.
Pero
también es verdad que en mi caso
todo
esto sí me ha hecho crecer hacia un lugar de paz.
El
dolor y el cansancio me ayudaron a conectar con la esencia,
para
sobrevivir quizás.
Y
desde este lugar, donde el cuerpo se convierte en mera herramienta,
jodida,
pero herramienta,
soy
capaz de apreciar mejor todo lo demás.
Puedo
sanar mi alma mirando el mar o sintiendo la savia de un árbol
anciano.
No
sé cómo sería mi vida ni yo misma si todo hubiera sido diferente.
Sí
sé que siendo como es, me siento satisfecha y en paz.
También
infinitamente agradecida por esta oportunidad.

Comentarios
Publicar un comentario
Muchas gracias 😊
Por estar, por leerme y encima dedicar un ratito de tu vida más para compartir tu opinión y tu sentir.
Todo mi amor 💕