Uys, que se me pasan los días,
los meses
y casi hasta el año.
El tiempo vuela.
Y yo apenas encuentro
un ratito para mis letras.
Un nuevo propósito.
Porque a mi esto de sentarme aquí
me alivia.
Aunque no tenga
un dolor que sacar.
Siempre alguna emoción
se calma.
La expresión libre del alma
es sanadora.
Es verdad que al estar rodeada
de naturaleza y paz
la necesidad de comunicar baja.
He descubierto otro placer
parecido al de mirar el mar.
El fuego.
Ninguna llama tiene igual.
Como las olas.
Cada cual guarda su tesoro,
único e irrepetible.
Observar el fuego
me lleva dentro.
Muy dentro.
Así que en casa tengo el fuego
y a diez minutos
el mar.
¿Se puede ser más afortunada?
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Muchas gracias 😊
Por estar, por leerme y encima dedicar un ratito de tu vida más para compartir tu opinión y tu sentir.
Todo mi amor 💕